
Hasta 60 mil litros por hora gasta un grifo abierto ilegalmente, situación que ocurre principalmente durante el verano y los días de más calor.
Pese a que muchas veces los grifos son abiertos para que los niños puedan disfrutar de una tarde de diversión, esto tiene graves consecuencias.
Roberto Rivas, gerente zonal de Essbio, detalló que abrir ilegalmente uno de estos dispositivos afecta no solo el trabajo de Bomberos en caso de una emergencia.
También los vecinos pueden verse afectados por bajas de presión e inundaciones entre otros problemas.
En términos de cifras, el gerente zonal de Essbio aseguró que en la región existen más de 2.300 grifos, de los cuales 1.300 se encuentran en Chillán.
El ejecutivo de la sanitaria detalló además que todos se encuentran operativos.
El llamado de las autoridades y ejecutivos de Essbio es a evitar la utilización ilegal de los grifos y hacer uso racional del agua, especialmente en tiempos de verano.